Hay edificios en las ciudades que tanto por su valor arquitectónico como por la actividad pública que históricamente han generado donde se enclava, forman parte de la leyenda urbana y de una importante referencia para sus ciudadanos. Es el caso del Hotel Miramar en Málaga, cuya rehabilitación está motivada por la intención de recuperar su uso inicial hotelero, se intenta devolver a la ciudad este importante equipamiento después de un largo y complejo recorrido de otros usos alternativos.
Conociendo la historia del Hotel Miramar de Málaga
Su adjudicación fue objeto de un concurso público, que convocado por la Consejería de Economía y Hacienda de la Junta de Andalucía decidía recuperar su uso de Hotel que anteriormente fue reemplazado por el de Palacio de Justicia durante los veinte últimos años. El concurso fue ganado por la cadena de “HOTELES SANTOS” en el año 2.008, que con la propuesta de “Estudio Segui” se adjudicó el proyecto de rehabilitación para su nueva apertura como “Gran Hotel Miramar”.
El proyecto original del Hotel fue redactado inicialmente en los primeros años del pasado siglo XX por el Arquitecto Fernando Guerrero Strachan ,siendo sus elementos decorativos fueron realizados por el pintor Enrique Jaraba, cuyos rasgos más característicos del edificio son la individualización de los volúmenes y tejados a distintas alturas y los policromos paneles de trencadís que denotan una novedosa influencia modernista, también apreciable en los herrajes y decoraciones cerámicas que aparecen en sus fachadas interiores y exteriores. Su distribución en planta cuadrada, con una perfecta geometría que gira alrededor de un gran vestíbulo central con su magnífica cubierta de cristal con decoraciones policromadas, representa una excepcional etapa modernista reflejo de la cultura arquitectónica de la época en que fue concebido y construido el edificio.
La propuesta de rehabilitación que ahora se realiza trata de recuperar este bello edificio para la ciudad, restableciendo no solo sus principales características originales arquitectónicas que fueron modificadas en los diferentes cambios de uso que desde el año 1.987 sufrió el edificio, sino también el incuestionable uso hotelero por el que fue diseñado y concebido originalmente para potenciar la actividad turística y social de una brillante etapa de la ciudad. Por todo ello, la rehabilitación del Hotel Miramar representa algo más que un nuevo equipamiento hotelero para la ciudad, ya que en todo caso trata de recuperar un “trozo” de la historia de ciudad en cuanto a lo que su identidad significa para sus habitantes y lo que representa como referencia paisajista e histórica de su ciudad.
Con respecto a su cualificación urbanística, la recuperación del Hotel va a suponer una importante actuación no solo para la renovación del sector urbano en donde se sitúa, sino también para la actividad turística de la ciudad por su excepcional y potente presencia urbana. En todo caso se ha tratado de reinterpretar el pasado desde la modernidad que nos exige el presente, incorporando e integrando diseños y tecnologías de última generación que aporte las exigencias que requiere una instalación de estas especiales características. Su espléndido Salón Central con su magnífica bóveda acristalada al que se conectan los grandes Salones de Eventos y terrazas con vistas al mar y jardines históricos; sus Habitaciones con decoraciones personalizadas, recuperando la diversidad de sus concepciones diferenciadas; sus Centros de Reuniones y Congresos , con el espectacular Mirador de su cubierta con magníficas vistas a la bahía del frente marítimo…y en definitiva el conjunto de sus espacios comunes y galerías que le aportan la majestuosa escala de su arquitectura, conformando así una propuesta que va más allá de las propias exigencias de un hotel para convertirlo en un lugar “mágico” de emociones y convivencias .
No es una casualidad que el retorno hotelero del Miramar se produzca en uno de los momentos turísticos más brillantes de la ciudad de Málaga, en dónde la apertura de sus nuevos grandes Museos y su potente turismo de Cruceros la convierten también en uno de las más importantes destinos del turismo nacional e internacional. La pieza del Hotel Miramar va a jugar un importante papel en este nuevo “damero” de la ciudad, siendo el pivote sobre el cual se articule la actividad urbana y social de esta nueva situación y dimensión urbana de la ciudad de Málaga.
José Seguí Pérez.
Arquitecto
